¿Por qué está prohibido que las japonesas lleven gafas?

¿Sabías que en Japón está prohibido que las japonesas lleven gafas? Te contamos la curiosa explicación a esta noticia, que aunque no lo parece, es real.

Esta semana muchos medios de comunicación recogen una noticia sobre Japón que ha resultado especialmente polémica: en el país nipón está prohibido que las mujeres lleven gafas de ver en sus trabajos. Aunque cueste creerlo, la noticia es real, y se publicó primero en algunos periódicos locales.

No se trata, eso sí, de una prohibición generalizada, sino de la decisión de algunas empresas. Los códigos de vestimenta en algunos centros de trabajo de Japón ya han resultado polémicos antes.

Hace tiempo, por ejemplo, nos enteramos de que la mayoría de empresas japonesas obligan a sus trabajadoras a llevar tacones en el trabajo. Nada dicen, sin embargo, de la ropa o zapatos que deban llevar los hombres. Aquello provocó la ira de muchas mujeres en Japón y otros países del mundo, y se viralizó el hashtag #KuToo, para visibilizar el machismo vigente en la sociedad japonesa.

Ahora, la noticia de que está prohibido que las japonesas lleven gafas en sus lugares de trabajo ha causado más revuelo todavía si cabe.

La explicación que han dado las empresas es un tanto rocambolesca y no ha hecho más que hacer crecer las críticas. Algunas empresas, como las aerolíneas, han argumentado que se trata de una cuestión de seguridad. Sin embargo, no se lo han prohibido a los hombres.

Otras han ido incluso más lejos. Las mujeres con gafas, han dicho, causan una mala impresión a los clientes porque parecen frías y distantes. Incluso hay empresas que han dicho que las gafas no permiten que se vea bien el maquillaje de sus empleadas. Recordemos que la de ir maquilladas al trabajo es otra de las obligaciones impuestas a la mayoría de mujeres niponas.

Japón es uno de los países más desarrollados del mundo. Potencia económica y turística mundial, el país destaca por muchos motivos, y sin embargo siguen demostrando, con medidas como estas, que aún queda mucho por avanzar en la igualdad de género.